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GÉNEROS CINEMATOGRÁFICOS

En la teoría cinematográfica, el género se refiere al método de agrupar y clasificar las películas. En suma, se trata de categorías temáticas, codificadas a lo largo de los años e inteligibles por parte de los espectadores. Esta forma tipificada de narrar hereda muchas de esas categorías de la literatura, y muy singularmente de la narrativa popular, que reitera ciertos elementos para simplificar la comprensión del relato.

Es interesante destacar que EN TODOS LOS GÉNEROS SEÑALADOS tenemos muchas películas en la que las matemáticas intervienen de una u otra forma, y que forman parte del elenco de películas estudiadas y tratadas en nuestro portal

www.mathsmovies.com

 

Como podréis apreciar a continuación, todos los géneros cinematográficos mencionados tienen algún enlace que nos lleva a nuestra página, relacionando las Matemáticas y el cine.

 

Vamos a realizar una primera clasificación atendiendo a las fórmulas narrativas, al tema y a la escenografía típica. Así podremos distinguir:

 

Cine cómico

En líneas generales, el cine cómico propicia las situaciones hilarantes mediante acrobacias y convenciones visuales, y la comedia lo consigue por medio de efectos lingüísticos. En ambos casos, el cine practica el humorismo y causa nuestra carcajada. Dicho de otro modo, lo que nos hace reír es comprobar que un personaje, de quien se esperaba una determinada actuación, efectúa otra muy distinta, a veces disparatada, caracterizado por la inclusión de gags, chistes o bromas, tanto visuales como verbales.

"El regador regado" (1896), película francesa de los hermanos Lumière, se considera la primera comedia de la historia del cine. Entre las estrellas que triunfaron durante ese periodo figuran Buster Keaton, Harold Lloyd, Max Linder, Harry Langdon, Charles Chaplin "Charlot" y  "el Gordo y el Flaco".

Elogiado por el movimiento surrealista, el cine cómico mantuvo cierta vigencia con la llegada del sonoro. De hecho, buena parte de la eficacia interpretativa de cómicos como Danny Kaye, Jacques Tati y Jerry Lewis proviene de sus gags visuales, desarrollados sin necesidad de diálogos explicativos.

 

El navegante (Donald Crisp y Buster Keaton, 1924)

La quimera de oro (Charles Chaplin, 1925)

Mi Tío (Jacques Tati, 1958)

 

El navegante (Donald Crisp y Buster Keaton, 1924)

 

La comedia

La comedia proyecta el despropósito de ciertas convenciones, fomentándose una línea carnavalesca, que logra la comicidad por medio de una interrupción del orden establecido, poniendo del revés las normas y desintegrando los criterios de urbanidad para, al final del espectáculo, restituir el orden que antes fue alterado.

Pese a recurrir con frecuencia a los estereotipos, la comedia cinematográfica incide en la singularidad psicológica de sus personajes, con frecuencia derrotados por un cúmulo de situaciones que, por azar, logran superar. A imagen de su contrapartida teatral, también el cine de comedia asume diversas tendencias, como la farsa, el vodevil, el sainete y la comedia sentimental, que adapta a las convenciones del lenguaje fílmico.

La comedia alocada y verbal de los Hermanos Marx fue incluso intelectualizada por humoristas como Woody Allen en obras como "El dormilón" (1973) y Annie Hall (1977).

La comedia romántica y festiva, que en otro tiempo dirigieron cineastas como Howard Hawks, se mantiene en la actualidad, si bien con una dosis inferior de talento en los diálogos.

 

Sopa de ganso (Leo McCarey, 1933)

La fiera de mi niña (Howard Hawks, 1938)

La novia era él (Howard Hawks, 1949)

 

La vecina de al lado (Luke Greenfield, 2004)

 

Cine negro

El cine negro o film noir es un género cinematográfico que se desarrolló en Estados Unidos durante la década de 1940 y 1950.

El término de film noir fue acuñado por primera vez por el italiano Nino Frank y es usado por la crítica cinematográfica para describir un género de definición bastante imprecisa, cuya diferenciación de otros géneros, como el cine de gángsteres o el cine social, es sólo parcial. Habitualmente, las películas caracterizadas como de cine negro giran en torno a hechos delictivos y criminales, con un fuerte contenido expresivo y una característica estilización visual. Su construcción formal está cerca del expresionismo.

Se emplea un lenguaje elíptico y metafórico donde se describe la escena caracterizado por una iluminación tenebrosa en claroscuro, escenas nocturnas con humedad en el ambiente, se juega con el uso de sombras para exaltar la psicología de los personajes. Algunos de estos efectos eran especialmente impactantes en blanco y negro. Al mismo tiempo, la personalidad de los personajes y sus motivaciones son difíciles de establecer (caso paradigmático son los detectives privados, frecuentes protagonistas del género, tales como Sam Spade o Philip Marlowe). Las fronteras entre buenos y malos se difuminaban y el héroe acostumbra a ser un antihéroe atenazado por un pasado oscuro.

Por su ambientación fotográfica y escenográfica, el cine negro delata su vinculación al expresionismo alemán, del cual tomó los toques de estilización tenebrosa, los contraluces y el tono sombrío de sus decorados. En lo que concierne a sus implicaciones ideológicas, cabe destacar que el género tiende a alejarse del maniqueísmo, optando por una perspectiva fatalista de la realidad.

En buena medida, los personajes de esta variedad cinematográfica son antihéroes, cuyo triunfo en la vida es siempre aparente.

Los finales suelen ser agridulces y, cuando no, presentan directamente el fracaso del protagonista. Otro punto característico del cine negro es la presencia de la femme fatal, la mujer fatal que, aparentemente inofensiva, puede conducir a sus víctimas al peligro o a la muerte. Las novelas de Dashiell Hammett y Raymond Chandler, con sus detectives Spade y Marlowe, son frecuentes fuentes de los guiones del género.

Se suele considerar como la primera película de este tipo...

 

"El halcón maltés" (John Huston, 1941) con Humphrey Bogart y Mary Astor

 

aunque existe una primera etapa que se caracteriza por su reflejo de la lucha contra el crimen organizado, patente en...

 

 "El enemigo público" (William Wellman, 1931)

"Hampa dorada" (Mervyn LeRoy, 1931)

"Scarface, el terror del hampa" (Howard Hawks, 1932)

 

Inspirándose en los modelos novelescos del género, Hollywood proporcionó obras maestras como

 

Historia de un detective (Edward Dmytryk, 1944)

Perdición (Billy Wilder, 1944)

El sueño eterno (Howard Hawks, 1946)

El cartero siempre llama dos veces (Tay Garnett, 1946)

 

A partir de la década de los setenta, el género en estado puro tendió a desaparecer. No obstante, algunos cineastas rescataron sus elementos esenciales, variando la ambientación e incluso proyectándola hacia el futuro.

 

Pulp Fiction  (Quentin Tarantino, 1994)

L.A. Confidential (Curtis Hanson, 1997)

 

Pulp Fiction  (Quentin Tarantino, 1994)

 

Cine del Oeste

Como su nombre indica, el western o cine del Oeste, es el género cinematográfico que relata historias relacionadas con la conquista y colonización de los territorios occidentales de Estados Unidos. Una conquista que fue llevada a término a lo largo del siglo XIX por parte de inmigrantes europeos, que llegaban en caravanas para ocuparse en los tres principales negocios que brindaba esa franja continental: la agricultura, la ganadería y la minería aurífera.

Enfrentados con los pueblos indígenas y con la delincuencia organizada, esos pioneros simbolizaron sus esperanzas de progreso y prosperidad en los justicieros ocasionales, convertidos en héroes gracias al folletín y a la novela por entregas.

 

Asalto y robo de un tren (Edwin S. Porter, 1903)

 

Se considera que la época dorada del western corresponde fundamentalmente al cine estadounidense de los años 50 y anteriores.

 

La Diligencia (John Ford, 1939)

Sólo ante el peligro (Fred Zinnemann, 1952)

Raíces profundas (George Stevens, 1953)

Río Bravo (Howard Hawks, 1958)

El hombre que mató a Liberty Valance (John Ford, 1962)

 

Coincidiendo con una sensación progresiva de pérdida de interés por parte del público, se fueron desarrollando nuevas vertientes, a veces dentro del conjunto de los directores más clásicos y otras veces “desde fuera”, ya fuese desde otros países (el Spaghetti Western en Italia y España) o desde la visión de una generación más joven, que introdujo nuevos elementos en el género.

 

El bueno, el feo y el malo  (Sergio Leone, 1966)

Hasta que llegó su hora (Sergio Leone, 1968) 

 

El bueno, el feo y el malo  (Sergio Leone, 1966)

 

El musical

El cine musical es un género cinematográfico que se caracteriza por películas que contienen interrupciones en su desarrollo para dar un breve receso por medio de un fragmento musical cantado o acompañados de una coreografía, incluyendo de esta forma canciones o temas bailables en una parte fundamental de su desarrollo dramático.

En los comienzos de este género, el fragmento tenía como objetivo impresionar sin mantener mucha conexión con el desarrollo narrativo. Sin embargo, al alcanzar su madurez, se estiliza el género y los números concatenan la historia.

Ningún otro género cinematográfico es tan inequívocamente americano como el musical. El concepto del espectáculo que impera en todos los aspectos de la sociedad de EE. UU. alcanza uno de sus máximos exponentes en el cine y, dentro de él, en las elaboradas coreografías, las melodías inolvidables y las obras maestras que ha dado el musical.

El cantor de jazz (Alan Crosland, 1927), se considera el primer filme sonoro y primer musical de la historia, que incluía canciones de autores tan famosos en aquel tiempo como Irving Berling y Jimmy Monaco.

 

Sombrero de copa (Mark Sandrich, 1935)

El mago de Oz (Victor Fleming, 1939)

Un día en Nueva York (Stanley Donen, 1949)

Cantando bajo la lluvia (Gene Kelly y Stanley Donen, 1952)

Melodías de Broadway 1955 (Vincente Minnelli, 1953)

 Loco por el circo (Michael Kidd, 1958)

West Side Story (Robert Wise y Jerome Robbins, 1961)

Sonrisas y lágrimas (Robert Wise, 1965)

Mary Poppins (Robert Stevenson, 1964)

 

El mago de Oz (Victor Fleming, 1939)

 

Terror

El cine de terror es un género cinematográfico que se caracteriza por su voluntad de provocar en el espectador sensaciones de pavor, miedo, disgusto, repugnancia u horror. Sus argumentos frecuentemente desarrollan la súbita intrusión en un ámbito de normalidad de alguna fuerza, evento o personaje de naturaleza maligna, a menudo de origen criminal o sobrenatural.

 

El gabinete del doctor Caligari (Robert Wiene, 1919)

Nosferatu (F. W. Murnau, 1922)

 

El gabinete del doctor Caligari (Robert Wiene, 1919) Nosferatu (F. W. Murnau, 1922)

Ya en los años treinta, la productora Universal, dirigida por Carl Laemmle, contrató a intérpretes como Bela Lugosi y Boris Karloff, y a cineastas como Tod Browning y James Whale, para que desarrollasen proyectos de clara inspiración terrorífica.

 

Drácula (Browning, 1930)

El doctor Frankenstein (Whale, 1931)

 

Sin duda ese sadismo propio de los psicópatas también atrajo al público estadounidense, que lo descubrió en Psicosis (Alfred Hitchcock, 1961). Poco después, una nueva generación de cineastas se encargaba de eliminar las sutilezas, dando rienda al horror más descarnado.

 

La noche de los muertos vivientes (George A. Romero, 1968)

La matanza de Texas (Tobe Hooper, 1974)

 

Realmente éste es un género en pleno auge y con una pleyade de seguidores, por lo que nos vamos a limitar a señalar algún título que consideramos reseñable.

 

La semilla del diablo (Roman Polanski, 1968)

La profecía (Richard Donner, 1976)

Las colinas tienen ojos (Wes Craven, 1977)

El resplandor (Stanley Kubrick, 1980)

Viernes 13 (Sean S. Cunnigham, 1981)

Pesadilla en Elm Street (Wes Craven, 1984)

El silencio de los corderos (Jonathan Demme, 1991)

 

El incidente  (M. Night Shyamalan, 2008)

Ciencia-ficción

La ciencia ficción es la denominación popular con que se conoce a uno de los géneros derivados de la literatura de ficción (junto con la literatura fantástica y la narrativa de terror). Nacida como subgénero literario distinguido en la década de 1920 y exportada posteriormente a otros medios, el más notable de ellos, el cinematográfico, gozó de un gran auge en la segunda mitad del siglo XX debido al interés popular acerca del futuro que despertó el espectacular avance, tanto científico como tecnológico, alcanzado durante esos años.

Entre los estudiosos del género no se ha podido llegar a un consenso amplio sobre una definición formal, siendo éste un tema de gran controversia. En general se considera ciencia ficción a los cuentos o historias que versan sobre el impacto que producen los avances científicos, tecnológicos, sociales o culturales, presentes o futuros, sobre la sociedad o los individuos.

Una definición posible del género es la propuesta por los escritores Eduardo Gallego y Guillem Sánchez en su artículo

 ¿Qué es la ciencia-ficción?

"La ciencia ficción es un género de narraciones imaginarias que no pueden darse en el mundo que conocemos, debido a una transformación del escenario narrativo, basado en una alteración de coordenadas científicas, espaciales, temporales, sociales o descriptivas, pero de tal modo que lo relatado es aceptable como especulación racional".

El cine de ciencia-ficción ofrece, en líneas generales, una visión negativa del futuro, lo cual ha hecho entender a los especialistas que, a través de este tipo de producciones, el espectador intenta conciliar los temores que le asaltan ante hallazgos científicos que le resultan de difícil comprensión. Simbolizando ese miedo a través de un estereotipo, cabe señalar que una de las figuras más tópicas de la ficción especulativa es el sabio loco: un investigador muy competente, que descubre algún mecanismo o fenómeno de enorme poder, aunque asimismo capaz de enturbiar la moral del científico, que entonces se convierte en un peligro para la humanidad.

En buena medida, el cine sigue el rastro de la literatura. Así, Georges Méliès se inspiró en la obra de Julio Verne para rodar su "Viaje a la luna" (1902). De igual modo, los nuevos descubrimientos tecnológicos promueven argumentos de ficción. Tal fue el caso del español Segundo de Chomón, cuyo filme más conocido, El hotel eléctrico (1908), profundiza en las posibilidades de la energía eléctrica, cuyo uso se generalizaba por aquellas fechas.

Veamos algunos títulos, de entre los muchos que cabrían mención:

 

Ultimátum a la Tierra (Robert Wise, 1951)

La mosca (H.G. Wells, 1958)

2001: Odisea del espacio (Stanley Kubrick, 1968)

Alien, el octavo pasajero (Ridley Scott, 1979)

Star Trek, la película (Robert Wise, 1979),

Mad Max, salvajes de la autopista (George Miller, 1978)

Blade Runner (Ridley Scott, 1982)

Terminator (James Cameron, 1984)

Robocop (Paul Verhoeven, 1987) y Desafío total (Paul Verhoeven, 1992)

Parque Jurásico (Steven Spielberg, 1993)

Independence Day (Roland Emmerich, 1996)

 

Ultimátum a la Tierra (Robert Wise, 1951)

2001: Odisea del espacio (Stanley Kubrick, 1968)

 

Melodrama

Si existe una categoría temática difícil de establecer en el cine, ésa es la del melodrama. La razón es bien simple: sus estrategias estilísticas y sus cualidades argumentales (sentimientos desaforados, golpes de efecto en la línea dramática, redención de los personajes a través del afecto, preeminencia del estereotipo folletinesco) son aplicables a la inmensa mayoría de las películas existentes.

Abarca películas que tienen una carga emocional o moral muy fuerte o emotiva, atendiendo al gusto de cada persona. Son películas dramáticas que buscan ser lo más realistas posibles, y tenemos a muchos realizadores de ellas. Esto no significa que no busquen experimentar con la narrativa, el tiempo, los efectos visuales o especiales, sino que en todo momento buscan dar un significado y connotación humana.

Tiene como objetivo conmover a través de los sentimientos y no de la razón. Todo melodrama contiene una propuesta conductual o moralista, incidiendo sobre los valores sociales aceptados por la vía sentimental y no la racional.  De aquí surgirán muchos géneros mixtos o híbridos.

 

Un lugar en el sol (George Stevens, 1951)

Persona (Ingmar Bergman, 1966)

Rompiendo las Olas (Lars Von Trier, 1996)

La vida es bella (Roberto Benigni, 1998)

La pianista (Michael Haneke, 2001)

 

La vida es bella (Roberto Benigni, 1998)

 

Histórico

Es un género cinematográfico que gira en torno a la narración de uno o varios hechos históricos reales. Es uno de los géneros más comunes del cine y sus orígenes datan de los primeros años de vida del Séptimo Arte.

En muchas ocasiones ha sido usado como una herramienta política y muchas veces ha sido utilizado como método de propaganda.

Aunque con el tiempo se han llegado a convertir en dos géneros propios, debido a su gran extensión y personalidad, el cine bélico y el bíblico nacieron al amparo del histórico.

Nuestra idea de la Edad Media, de la Revolución Francesa o incluso de las guerras mundiales, está filtrada a través del cine, mucho más influyente en su divulgación que cualquier otro medio. En algún caso, los críticos hablan de fidelidad en la reproducción del pasado, pero ello también supone un error, puesto que esa fidelidad sólo suele limitarse al vestuario, los decorados y la situación general de la trama.

Los tres momentos históricos que han inspirado en mayor grado al género son la antigüedad greco-romana, la Edad Media y la Segunda Guerra Mundial.

 

Ben Hur (William Wyler, 1959)

Espartaco (Stanley Kubrick, 1960)

La caída del Imperio Romano (Anthony Mann, 1964)

La batalla de Midway (Jack Smight, 1976)

Apocalypse Now (Francis Ford Coppola, 1979)

Salvar al soldado Ryan (Steven Spielberg, 1998)

Gladiator (Ridley Scott, 2000)

Banderas de nuestros padres (Clint Eastwood, 2006)

Cartas desde Iwo Jima (Clint Eastwood, 2006)

 

Banderas de nuestros padres (Clint Eastwood, 2006)

 

Cartas desde Iwo Jima (Clint Eastwood, 2006)

 

Aventuras

El cine de aventuras es un género cinematográfico que refleja un mundo heroico de combates y aventuras. Suele predominar la acción y valores caballerescos. Dado que se trata de un modelo dramático, sin una ambientación específica, conviene aclarar que el género de aventuras puede generar argumentos de inspiración policíaca, histórica o bélica. De hecho, esta variedad cinematográfica engloba subgéneros como el cine de espías, el cine de aventuras selváticas, el cine de artes marciales, el cine de capa y espada...

Sus características generales son:

- Tratamiento intrascendente y seudodramático de los conflictos que plantea.

- Las escenas de mucha acción: batallas, persecuciones,... siempre se filman en planos cortos.

- Personajes estereotipados y antitéticos (un héroe fuerte, valeroso y un villano).

- Los personajes luchan por un objetivo: tesoro, resolución de un misterio, rescate de personas...

- Premisa: El bien siempre prevalece sobre el mal.

- Protagonistas atraviesan por obstáculos y sufren una transformación a lo largo de la historia.

- La acción dramática ocurre alejada de los espacios cotidianos. Siempre en lugares poco usuales: selvas, desiertos, galaxias, etc.

- Frecuentemente la acción sucede en el pasado.

- Se le da más peso a la ambientación, vestuario y efectos especiales que al guión.

 

El halcón del mar (Michael Curtiz, 1940)

Sansón y Dalila (Cecil B. De Mille, 1949)

En busca del Arca Perdida (Steven Spielberg, 1981)

Conan el bárbaro (John Milius, 1982)

Indiana Jones y el Templo Maldito (Steven Spielberg, 1984)

Indiana Jones y la última cruzada (Steven Spielberg, 1989)

La momia (Stephen Sommers, 1999)

La Comunidad del Anillo (Peter Jackson, 2001)

 

Los vengadores (Jeremiah Chechik, 1998)

 

Suspense

Mecanismo por el que se crea una tensión en el espectador mediante artificios que prolongan la incertidumbre sobre el desenlace de una acción, casi siempre con riesgo de muerte u otra fatalidad para sus protagonistas. El sobresalto que provoca es característico del cine policiaco o thriller. Ni que decir tiene que el "Mago del suspense", Hitchcock, dominaba todos los recursos: el contraste entre lo que sabe el público y los protagonistas, dar al espectador más información que a sus personajes, etc.

 

Psicosis (Alfred Hitchcock, 1960)

Cortina rasgada (Alfred Hitchcock, 1966)

El Resplandor (Stanley Kubrick, 1980)

El Silencio de los Corderos (Jonathan Demme, 1991)

El Sexto Sentido (Night Shyamalan, 1999)

 

Cortina rasgada (Alfred Hitchcock, 1966)

 

Documental

El cine documental, de acuerdo con las convenciones asumidas por los teóricos de los medios audiovisuales, es aquél que se aleja de la ficción y refleja acontecimientos reales. Con todo, esa dicotomía entre ficción y documental, no deja de ser un equívoco, dado que la mirada del creador -el cineasta- moldea en ambos casos un relato.

Por ejemplo, cabe imaginar un documental sobre la vida de un animal. Muy probablemente, el guión de dicho documental dramatice los hechos esenciales que rodean a la especie en cuestión, e incluso es probable que los técnicos encargados del rodaje hayan trucado con toda meticulosidad situaciones que, de otro modo, no hubiera sido posible captar con la cámara. Incluso es posible que la filmación se lleve a cabo con animales amaestrados, cual si de actores se tratara. Así pues, a efectos narrativos, esa película será tan artificiosa como una producción de naturaleza dramática, sólo que en este caso el propósito será distinto, pues el documentalista pretende recrear hechos que sí se han dado en el mundo real.

Con frecuencia, los programas de ficción adoptan una estructura y modo de narración muy cercanas al documental y, a su vez, algunos documentales reproducen recursos propios de la creación de obras de ficción.

En realidad, el cine de pioneros como los hermanos Lumière reflejaba situaciones de la cotidianidad con matices documentales. Sin embargo, las verdaderas raíces del género se sitúan en dos fórmulas cinematográficas, el documentaire, travelogue o película de viajes, y el newsreel o filme informativo.

Casi como una reacción a los artificios de la ficción, el documental ha sido también, a fines de la década de los cincuenta, muy influyente en lo que a tendencias se refiere. Por sus connotaciones de autenticidad, se advierte su presencia en corrientes como el free cinema inglés, el neorrealismo italiano y el cinéma vérité, donde se aúnan la espontaneidad y la dramatización. Otro subgénero que se deriva de esa mezcla es el docudrama, donde los protagonistas de un determinado hecho lo reconstruyen ante la cámara, recreando así su propia realidad.

Nanuk el esquimal (Robert Flaherty, 1922), es considerado uno de los padres del cine documental. Su primera película tuvo que rodarla dos veces, tras perder todo el material rodado durante años en un incendio en el laboratorio. Este accidente le abrió los ojos, y decidió no limitarse a registrar la realidad, para pasar a intervenir en ella más activamente, creando, a partir de materiales reales, una narración compleja.

 

"Las Hurdes. Tierra sin pan" (Luis Buñuel, 1932)

Por qué Israel (Claude Lanzmann, 1973)

Shoah (Claude Lanzmann, 1985)

 

Las Hurdes. Tierra sin pan (Luis Buñuel, 1932)

 

Animación

Más que una tendencia temática asimilable a determinado tipo de argumentos, el cine de dibujos animados define una técnica que sustituye la filmación de actores y escenarios por el uso de ilustraciones, muñecos articulados o planos infográficos o computerizados, animados, toma a toma, hasta lograr la sensación de movimiento.

Es decir, que mientras en el cine de imagen real se analiza y descompone un movimiento real, en el cine de animación se construye un movimiento inexistente en la realidad. De ese modo, el elemento estático es combinado con otros, ordenados en una sucesión coherente, de manera que, en virtud de una manifestación de la óptica -la llamada persistencia de la visión o persistencia retiniana-, nuestro cerebro asume ese proceso cual si de un movimiento auténtico se tratase.

En cierto modo, ese mismo fenómeno es el que explica que podamos disfrutar de cualquier filme, pues éste no es otra cosa que una sucesión de fotogramas en el celuloide.

 

Alicia en el país de las maravillas  (Eduardo Plá, 1951)

Donald en el país de las Matemáticas  (Hamilton Luske, 1959)

Los Simpson (Matt Groening, 1989)

Futurama (Matt Groening y David X. Cohen, 1999)

A través de la banda de Moebius (Glenn Chaika, 2006)

Flatland. The movie (Ladd Ehlinger Jr., 2007)

 

 

Desde otro punto de vista, quizás con unos matices más económicos, podemos hablar de...

 

Cine independiente

Una película independiente es aquella que ha sido producida sin el apoyo inicial de un estudio o productora de cine comercial.

Por lo general es una producción de bajo presupuesto de una productora pequeña. La nueva generación de cámaras digitales contribuye a que sea más fácil realizar películas y, por tanto, a una popularización del cine independiente en todo el mundo en la actualidad.

El cine de industria puede ser o no de autor, mientras que el cine independiente lo será casi siempre. Actualmente existen muchos países que no tienen una fuerte industria del cine, y toda su producción puede ser considerada independiente.

Entre los directores que han hecho cine independiente podemos destacar:

George Lucas, Hal Hartley, Jim Jarmusch, Gus Van Sant, John Cassavetes, John Sayles, Kevin Smith, Orson Welles,  Paul Thomas Anderson, Quentin Tarantino, Robert Altman, etc.

 

Mala noche (Gus Van Sant, 1985)

Reservoir Dogs (Quentin Tarantino, 1992)

Moebius (Gustavo Mosquera, 1995)

Donnie Darko (Richard Kelly, 2001)

 

Moebius (Gustavo Mosquera, 1995)

 

Cine de autor

El concepto de cine de autor fue acuñado por los críticos de los Cahiers du Cinéma para referirse a un cierto cine en el que el director tiene un papel preponderante en la toma de todas las decisiones, y en donde toda la puesta en escena obedece a sus intenciones. Suele llamarse de esta manera a las películas realizadas basándose en un guión propio y al margen de las presiones y limitaciones que implica el cine de los grandes estudios comerciales, lo cual le permite una mayor libertad a la hora de plasmar sus sentimientos e inquietudes en la película. Sin embargo, grandes directores de la industria, como Alfred Hitchcock, también pueden ser considerados «autores» de sus películas.

A menudo el director cumple también otras funciones, como el sonido, la fotografía, etc.

De hecho existen numerosos directores de renombre que han logrado realizar películas de autor dentro de la industria, entre ellos Tim Burton, Martin Scorsese, Woody Allen, los hermanos Coen, Terry Gilliam, Kevin Smith, etc.

 

 

A las cinco de la tarde  (Samira Makhmalbaf, 2003)

La historia del camello que llora (Byambasuren Daava y Luigi Falorni, 2003)

Las tragedias de Nina (Savi Gavizon, 2003)

Carta de una mujer desconocida (Xu Jinglei, 2004)

 

A las cinco de la tarde  (Samira Makhmalbaf, 2003)

 

Cine experimental

El cine es aquél que utiliza un medio de expresión más artístico, olvidándose del lenguaje audiovisual clásico, rompiendo las barreras del cine narrativo estrictamente estructurado y utilizando los recursos para expresar y sugerir emociones, experiencias, sentimientos, utilizando efectos plásticos o rítmicos, ligados al tratamiento de la imagen o el sonido.

Se define de acuerdo con su ámbito de aplicación y recepción, ya que no suele tratarse de un cine ligado a la industria, y no se dirige a un público amplio sino específico, y comparte a priori un interés por productos que se hallan fuera de los cánones clásicos.

 

Pi, fe en el caos (Darren Aronofsky, 1998)

 

Pi, fe en el caos (Darren Aronofsky, 1998)

 

Cine de género

Cine de producción comercial. Sin comentarios...

La jungla de cristal 3 (John McTiernan, 1995)

 

 

 

© Abel Martín & Marta Martín Sierra

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Las imágenes han sido tomadas de la TV y de Internet.

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