LA PIZARRA (2000)

(Takhté siah)

Ficha técnica

Duración: 01:21:54

Director: Samira Makhmalbaf

Reparto: Saeid Mohammadi, Bahman Ghobadi, Behnaz Jaffari, Mohammad Karim Rahmati Rafat Morad, Mayas Rostami, Saman Akbari

Música: Mohammad Reza Darvishi

Fotografía: Ebrahim Ghafouri

Guión: Mohsen Makhmalbaf, Samira Makhmalbaf

Producción: Marco Muller

País: Irán - Italia

 

Unos maestros van a la búsqueda de alumnos por las montañas del Kurdistán iraní con la esperanza de enseñar a leer y a trasmitir algunos pequeños conocimientos básicos de aritmética ...

Sinopsis (Advertencia: Esta sección contiene detalles de la trama y el argumento)

 

 

Con una pizarra al hombro, un grupo de profesores recorren y vagan por las montañas kurdas, en la frontera entre Irán e Iraq, tras un bombardeo en el Kurdistán y a la búsqueda de alumnos. La lucha diaria por la supervivencia no deja a la población ni tiempo ni fuerzas para aprender.

Después de un ataque de un helicóptero del ejército los profesores se separan. Uno de ellos, Said, encuentra un grupo de ancianos de Irak que intentan volver a ver la tierra donde nacieron, en territorio iraquí. Consigue ganarse la confianza del grupo usando su tablero como transporte para uno de los mayores. Said entonces intenta conseguir la mano de Hahaleh, la hija del hombre viejo, ofreciendo su tablero como dote.

 

Mientras tanto, su compañero, el profesor Reeboir se encuentra entre un grupo de niños  dedicados al contrabando de objetos robados, para quienes la educación tiene poco valor. Endurecidos por la cruda realidad de la existencia en las montañas, los muchachos procuran sobrevivir pasando mercancías de contrabando a través de la frontera entre Irán e Irak.

La guerra se mantiene siempre en un segundo plano, pero está omnipresente en el constante ruido de las ametralladoras.

¡¡Una película diferente donde quizás

podamos aprender a darle valor a ciertas cosas!!

Sólo activo en directo, en presentaciones y Congresos... Escena:  0:00:41 -  0:04:22  (Escena 1)

un grupo de profesores recorren y vagan por las montañas kurdas, en la frontera entre Irán e Iraq, tras un bombardeo en el Kurdistán y a la búsqueda de alumnos.

- Gracias por el agua -dice Said.

- ¿Dónde fuiste ayer? -pregunta uno de los compañeros de viaje.

- A Dezle. Buscando alumnos. Pero no hubo suerte. No pude encontrar ninguno.  Estuve tres día allí. Ni uno -dice contrariado Said, lamentándose de no haber sido pastor, como le había aconsejado su padre.

 

Sólo activo en directo, en presentaciones y Congresos... Escena:  0:14:30 -  0:16:19  (Escena 2)

Said llega a un pequeño pueblo a la búsqueda de "clientes"

 

- Tablas de multiplicar. Vengan y aprendan a multiplicar. Una vez dos es dos. Dos veces dos son cuatro. Señora. ¿Necesita un maestro?

Sólo activo en directo, en presentaciones y Congresos... Escena:  0:18:00 -  0:20:35  (Escena 3)

Por su parte Reeboir intenta convencer al grupo de muchachos contrabandistas de la importancia de saber leer, escribir, sumar...

 

 Puedes aprender a sumar... restar, hacer tus propias cuentas sin ser engañado... Tan bueno es todo eso. Podrías estudiar o encontrar un trabajo -insiste Reeboir

- Hacer las cuentas... eso es genial para un jefe... nosotros somos mulas... siempre en movimiento... ¿Cómo quieres que leamos?  Para leer hay que estar sentado - contesta el niño.

Sólo activo en directo, en presentaciones y Congresos... Escena:  0:40:55 -  0:41:54  (Escena 4)

Said intenta enseñar a su flamante esposa. Al negarse ésta, le pone notas bajas y ceros...

 

- Como te has negado a responderme, te pondré un cero... pero como eres una buena chica, te pondré un dieciocho. Dieciocho. ¿Por qué te niegas a aprender? Soy el mejor maestro de la zona. Todos mis alumnos tienen... veinte.  Más de veinte. Te mereces un cero. ¡Te daré dieciocho!

Sólo activo en directo, en presentaciones y Congresos... Escena:  0:57:45 -  1:00:32  (Escena 5)

 

- Una vez dos son dos. ¿Por qué estás huyendo? ¿He hecho algo mal? Si las Matemáticas son más difíciles, te enseñaré a leer. Repitan conmigo... ¡Te quiero! Mira, es fácil. Dilo. Mírame. ¿Qué clase de estudiante eres tú? Te daré un ocho. No, no un ocho. Así no aprobarás. Te daré un diez. Así pasarás. Dilo. Te daré un cero. Al menos dime que no me quieres. Aquí viene otro cero. Ahora un cero para tu hijo. Le pondré un cero a tu padre. Me pondré un cero a mí mismo... por haber sido tan estúpido como para seguirte. ¿Qué clase de vida es ésta?  Adiós - Le dice Said a su esposa.

La crítica

Makhmalbaf y el director de fotografía Ebrahim Ghafouri, en las más arduas condiciones de rodaje, crean una lona visual efectivamente realista —el sentido del sufrimiento y la dificultad es intensa y palpable—, pero ocasionalmente irreal, donde lo literal y lo metafórico se entrelazan mágicamente. Animado por una actuación natural de su troupe de actores no profesionales y rodado con un fondo devastador y pesimista, incluso a la luz de las joyas recientes tales como "El círculo", "El viento nos llevará" y "Una época para los caballos borrachos", "La pizarra" resalta como magnífico trabajo: áspero, dinámico y políticamente astuto.

No está claro que las pizarras tengan un significado per se. La imagen central de la película es el conocimiento abandonado, obligado a probar y venderse a sí mismo en un mundo donde no hay sitio para él. Es mucho más que una película humana, pero tampoco puede ser considerada estrictamente política. Presenta un espacio sin ley donde los protagonistas deben valerse por sí mismos.

Óscar Díaz

En una de esas metáforas que tanto agradan a su progenitor (en su episodio del tríptico "Tales of kish", un hombre escuálido atravesaba el desierto llevando una puerta sobre sus espaldas), en esta película de Samira Makhmalbaf, dos maestros, famélicos y sin escuela, recorren el Kurdistán iraní cargando con grandes pizarras. Tiene esta película secuencias sobrecogedoras que tampoco excluyen algunos toques de humor, en su retrato de gentes cultural y económicamente desheredadas, víctimas de la ignominia representada por dictadores que exterminan cualquier vestigio de humanidad y manipulan conciencias y creencias.

Lluís Bonet Mojica

 

El contraste entre la claridad de lo asible y la opacidad que surge en la distancia, en cielos tamizados o velados, también embarga "La pizarra", el segundo y más ornamental filme de Samira Makhmalbaf. Los momentos de mayor belleza son aquellos en que su idea de que "las montañas hablan" se hace concreta y no ya metafórica: el viento que trastabilla a los profesores, pues aquí la tierra tiembla; los paisajes áridos y neblinosos que contienen la cautela de los vivos ante los negros augurios de la muerte, con su vuelo sobre los terrizos ocres

Gonzalo de Lucas

Consiguió el Premio del Jurado en el Festival de Cine de Cannes 2000.

 

 

 

Web Oficial

© Abel Martín & Marta Martín Sierra

Esta página WEB se dedica exclusivamente a fines educativos, relacionando las "Matemáticas y el Cine".

No existe ningún interés lucrativo.

Las imágenes han sido tomadas de la TV y de Internet.

email     Mathsmovies