PRUEBAS DE ADIVINACIÓN
PRUEBA 01 ׀
PRUEBA 02 ׀
PRUEBA 03
׀
PRUEBA 04 ׀
PRUEBA 05
׀
PRUEBA 06
׀
Realízalas con la calculadora, para que te
resulte más cómodo y efectivo:
ÉSTOS Son UNOS DE LOS EJERCICIOS MATEMÁTICOS MÁS
SORPRENDENTES QUE TE PUEDAS IMAGINAR.
LA CENA Y ...
(SÓLO VÁLIDO PARA ESTE AÑO)
(1)
Elige el número de noches por semana que te gustaría cenar en un buen
restaurante.
(2) Multiplica la cifra por
dos.
(3) Añádele cinco.
(4) Al resultado multiplícalo
por cincuenta.
(5) Si tu cumpleaños ya ha
pasado este año, añade 1757, pero si no ha pasado, sólo añade 1756.
(6) Resta la cifra
correspondiente a tu año de nacimiento (1960, 1988, etc.)
(7) Deberías obtener un
número con tres cifras...
(8) La primera de las tres
cifras debería de ser:
SOLUCIÓN
(9) Y las dos últimas cifras
corresponden
SOLUCIÓN
OTRO INCREÍBLE ...
Me he encontrado un truco interesante en
Internet que hace tiempo mi padre me había explicado y ni me acordaba!
Son trucos sencillos y muy divertidos para dejar la boca abierta en un
momento de ocio.
El truco es el siguiente: pedis a alguien que
os escriba un número de cuatro cifras. En un papel aparte restáis 2 a
esa cifra y le ponéis un 2 delante:
Ejemplo si escriben 2435 vosotros escribiréis
22433.
Escribis el número aparte sin que nadie os
vea. Después pedís a alguien que escriba 4 números de cifras debajo. Una
vez hecho esto decís que el siguiente lo vais a escribir vosotros.
Tenéis que completar con nueves (es decir, hacer que la suma de vuestra
cifra y la anterior de todo nueves).
Ejemplo: si el primer número que han puesto es
el 2435 y el segundo el 2354
2435
2354
7645
Hemos puesto el 7645 porque
7+2=9, 6+3=9, 5+4=9 y 4+5=9. Tenéis que ponerlo simulando que lo ponéis
al azar.
Una vez hecho esto, repetimos la
operación otra vez, decimos que pongan otro número de cuatro cifras
debajo, y nosotros volvemos a poner otro completando a nueves con el
anterior
2435
2354
7645
4278
5721
Ahora viene lo bueno: decimos a
alguién que sume toda la columna. El resultado será el número que
previamente habíamos copiado en un papel. Consejo: verificar antes
porque casi todo el mundo se equivoca al hacer la suma.
Explicación: no tiene nada
misterioso. Fijémonos en los pares 2-3 y 4-5 de la columna, ambos suman
9999, por lo que los cuatro suman 19.998. Es decir, 20.000 menos que 2.
Sumando a la primer cifra es lo mismo que restarle 2 y ponerle un 2
delante.
Las sorpresas de este tipo se llaman paradojas de Hooper,
porque este autor las presentó en su obra Rational Recreations en 1795.
http://www.soygik.com/resuelve-el-problema-matematico/
Jeremy Davies
ha sido el primero en ser
confirmado en el papel del matemático
Russell.
Recordemos que este personaje es el de un brillante matemático
con mucha perspicacia y con un gran conocimiento en varios
campos científicos.
Desafortunadamente, tiende a ser bastante
directo con las personas
(por su propio bien) y eso hace que sus relaciones
personales no sean muy
buenas. Está fascinado por la magia y el
misterio aun trabajando
en el
mundo de la ciencia.
Apreciar la elegancia matemática de una fórmula
científica está al alcance de todos.
Recientemente la revista
Physics World proponía la recurrente pregunta de cuál
es la fórmula más distinguida del Parnaso científico-matemático. Las respuestas
brotaban y se publicaron en diferentes meses del presente año 2004. En
marzo se apostaba por enunciados cronológicamente más
novedosos, tales como la archiconocida ecuación de
Einstein E = m . c2; la de Planck-Einstein, E = h . f,
que mediante una constante enlaza energía con frecuencia en la física cuántica;
la erótica y compleja ecuación ondulatoria de
Schrödinger, así como otras de
Dirac,
Yang-Mills,
Drake o
Shannon e, incluso, por fórmulas químicas como la
descomposición del ozono: O3 -> O2 + O.
En
mayo las ecuaciones se retrotraían a la historia
previa al siglo XX, introduciéndose igualdades clásicas de aprendizaje
obligatorio, como la
Segunda Ley de
Newton (el mayor científico y matemático de todos los
tiempos), F = m . a (fuerza igual a masa por aceleración), o la ley de
Galileo (el creador del método científico) sobre la
caída libre según el modelo de movimiento uniformemente acelerado, s = ½ a . t2.
En
octubre se propuso una encuesta y se recibieron 120
respuestas con 50 ecuaciones propuestas. Media docena de personas planteó la
ecuación más elemental: 1 + 1 = 2 (en broma alguien podría matizar 1$ + 1 $ =
2$). Personalmente, prefiero el mensaje 2 + 1 = 3, que utilicé con el nacimiento
de mi primera hija, imitando al matemático
P.G. Lejeune-Dirichlet en su escueto y célebre
telegrama.
Existe un unánime acuerdo general sobre lo que, indiscutiblemente y desde hace
más de dos siglos se refrenda como la más bella ecuación descubierta hasta la
fecha, la sublime y mística fórmula de
Leonhard Euler: ei¶ + 1 = 0. Involucra de forma
fascinante a los cinco números más emblemáticos de las matemáticas, 0, 1, i
(unidad imaginara igual a raíz cuadrada de -1), y los números irracionales pi
(3,141592…) y e (2,718281…, base de los logaritmos neperianos. Muchos de quienes
contestaron dijeron "es la ecuación matemática más compleja y bella jamás
escrita"; "increíble y maravillosa"; "llena de belleza cósmica" o "simplemente
alucinante". Resulta conmovedor cómo interactúan la unidad imaginaria (i = √-1)
con números irracionales (e y ∏) para producir la nada (el cero) con una simple
suma con el 1. Esta escueta expresión algebraica contiene nueve conceptos
matemáticos -una sola vez cada concepto-: e (el número natural), la operación
exponencial, número PI, suma (o resta, según como se escriba), multiplicación,
números imaginarios, igualdad, los números reales 1 y 0.
Los criterios estéticos también están presentes en las teorías
matemático-científicas que describen las leyes de la naturaleza. Cuando le
preguntaron al físico
Paul Dirac si creía verdadera la inmortal fórmula de
masa-energía de
Einstein (sin duda una de las más exquisitas, E = m .
c2), respondió sencillamente ante la polémica del momento: “¡Qué más da si es
verdad o mentira; es tan bella!”.
Steven Weinberg, premio Nobel de Física, confesó:
"Creo que la general aceptación de la Teoría de la Relatividad General fue en
gran parte debida al atractivo de la propia teoría, esto es, a su belleza".
La perfección de una fórmula radica en múltiples factores, como los elementos
que la componen, el autor descubridor y el efecto histórico que originó. La
ecuación de
Einstein indujo el día más aciago de la raza humana,
el 6 de agosto de 1945, con la explosión de la primera
bomba atómica en
Hiroshima. Ello llevó a que
Einstein confesase días después que “Hubiese preferido
ser fontanero”. Atendiendo a la trascendencia histórica, probablemente
las ecuaciones de Maxwell, y en particular la Ley de
Faraday, son las han configurado más decisivamente la era actual en sus
parámetros científico-tecnológicos.
Dirac aseguraba que fue su sentido de la belleza lo
que le permitió descubrir la ecuación del electrón, porque "es más importante
alcanzar belleza en nuestras ecuaciones que hacer que cuadren con el
experimento". Como ya advirtiera
Weinberg: "No aceptaríamos ninguna hipótesis como
teoría final si no fuera bella". Para
Michio Kaku, la elegancia de una teoría posee dos
propiedades esenciales: “Simetría unificadora y capacidad de explicar gran
cantidad de datos experimentales mediante las expresiones matemáticas concisas”.
Opinión coincidente con la de
Weinberg: "La clase de belleza que encontramos en la
Física radica en la magnificencia de la simplicidad y de la inevitabilidad”.
El método científico nos muestra el máximo criterio estético que rige en la
naturaleza: la sencillez que contiene y explica las verdades más profundas. Las
ciencias y las matemáticas nos cautivan por argumentos éticos y estéticos
contundentes como ser logros conjuntos de la humanidad, escritos en el universal
lenguaje matemático y que nos pueden proporcionar un futuro esperanzador a todos
si son gestionados con inteligencia y bondad.